También es importante saber sobre las fallas más comunes que te pueden suceder y cuáles son sus causas, entre ellas tenemos:
1. La superficie del horno se pone demasiado caliente:
La causa más probable es que se esté utilizando un aislamiento de baja calidad, debes tomar en consideración que la temperatura más alta que debe tener un horno por fuera es de 40°C para que sea soportable al tacto.
2. El horno no produce calor:
Existen diferentes causas como; que el termostato no funcione o está ajustado muy bajo y por eso no pide calor también si el piloto está apagado provocará este problema.
3.El quemador no enciende:
Pueden ser diferentes causas como; falta de gas, por lo que debe verificarse el suministro. Ocurre también por presiones fuera de rango, daños en el detector de flama, aire en las líneas de gas (que requieren purgas), relaciones erróneas de aire y combustible y electrodos de ignición dañados o fuera de su sitio.
4. El horno hace mucho ruido al trabajar
Esta suele ser de las peores fallas porque no solo afecta la producción sino el ambiente de nuestro negocio al estar con ruido donde se nota que el equipo está fallando, pero cada ruido tiene diferente significado porque si es un ruido tipo “Chillido agudo” puede ser porqué la correa del soplador se está resbalando o los cojinetes del eje del motor necesitan ser engrasados pero si es un ruido tipo “Retumbo grave” puede ser por una luz de piloto mal ajustada y se da con los quemadores apagados y el último ruido tipo “Retumbo más grave” puede ser causado porque los quemadores están sucios y sucederá con estos encendidos. Nuestras recomendaciones para alargar la vida útil de tu equipo son:
- Mantener un plan de mantenimiento preventivo
- Si presenta alguna falla lo mejor será llevarlo donde profesionales..
- Utilizar repuestos de buena calidad.
Y por último, adquirir un horno de calidad para que tenga una vida útil más extensa.
Fallas de Proceso
Son tres las fallas de este tipo:
Curado incorrecto de las piezas o que no alcanzan la temperatura requerida
Algunos piensan que se trata de un problema del
horno industrial y lo ajustan inadecuadamente al desconocer la tecnología. Comúnmente, pueden controlarse por porcentaje o mediante el control de la temperatura del elemento resistivo. En este punto la gente suele confundirse y creer que la temperatura es la que alcanzará la pieza que curarán. No ocurre así. Por ejemplo, si se curará una pieza a 150 °F, sería equivocado ajustar el horno infrarrojo a 150 °F, debido a que se trata únicamente de una temperatura de referencia que regula la temperatura del elemento resistivo y la cantidad de rayos infrarrojos que libera. Lo adecuado es efectuar una tabla de correlación donde, mediante pruebas, se determine la temperatura de ajuste del horno para que la pieza alcance los 150 °F. Para ajustar la temperatura deben considerar varios factores, como tipo de termopar y su posición con relación al elemento resistivo, color de la pintura, entre otros. Es posible que el horno o elemento deba ajustarse a 450 °F para que la pieza alcance los 150 °F, lo que no implica que el horno falle.
Partes deformadas o quemadas
Se relaciona con el tiempo de residencia y la posición de termopares. En el primer caso, debido a que el calentamiento no se realiza como en el
horno de convección, la parte puede ganar temperatura sin importar la temperatura ambiental, ya que continúa expuesta a la radiación, por tal motivo si se deja demasiado puede quemarse o dañarse. En el segundo caso, el termopar puede cambiar de posición si es golpeado con una pieza, por lo que la última estará más expuesta a mayor cantidad de energía.
Termografías incorrectas
La mayoría de los hornos están zonificados para que las piezas ganen más calor al empezar el proceso para que incrementen rápidamente su temperatura y, posteriormente, se le proporcione únicamente energía para que mantenga una temperatura determinada. Casi todos los propietarios ajustan todas las zonas a la misma temperatura, lo que es un error habitual. Lo adecuado es ajustar las primeras zonas a temperaturas más altas que las últimas.
Fallas mecánicas
Se trata de las siguientes:
Explosión de contactores
Es común en ejemplares que usan contactores de mercurio. Al excitar dicho metal con voltaje, se expande, cierra el circuito y funge como conductor. Si los contactores tienen fugas, el mercurio de una fase tendrá contacto con el de otra fase, lo que deriva en cortocircuito, que a la vez causa pequeñas explosiones en el tablero de control que pueden causar un incendio.
Cortocircuitos en el interior del horno
Pasa comúnmente en
los hornos que funcionan con onda corta. En ocasiones, las piezas golpean y quiebran los tubos de cuarzo, lo que deja filamento de tungsteno expuesto que provoca cortocircuitos si toca tierra, por tal motivo, se recomienda sujetar bien las piezas al meterlas al horno. Esto regularmente ocurre en hornos de onda corta en donde se utilizan bulbos de cuarzo, en algunas ocasiones las piezas golpean los tubos de cuarzo, quebrándolos y dejando el filamento de tungsteno expuesto como si fuera una línea de voltaje y cuando esto toca tierra, causa un corto circuito. Es por esto por lo que se recomienda que las piezas estén bien sujetas al entrar al horno.
Valores de temperaturas demasiado altas
Ocurre comúnmente en el
horno industrial de onda larga debido a contactos entre el elemento resistivo y el termopar. En este caso, es necesario evaluar si el relleno de óxido cerámico está en buenas condiciones. Si está en buen estado, se sugiere cambiar el termopar. Si no lo está, debe cambiarse el panel.